La muerte estaba presente cuando la pregunta salió por la boca del médico, ¿qué harías si mañana fuese el último día de tu vida?, el hombre de 40 años lo miraba sorprendido, no podía creer lo que estaba escuchando, el doctor le estaba diciendo que iba a morir al día siguiente.
- Pues no se doctor, visitar a la familia, ir con una hermosa mujer, bailar desnudo delante de un convento, estar en casa con mi esposa y mis hijos.... no lo sé, ¿voy a morir mañana?
- No, esté tranquilo, su vida no corre peligro, la enfermedad ha sido vencida, puede hacer vida normal.
Esa misma noche, en casa del Doctor:
- Señor Doctor, ¿Qué harías si mañana fuese el último día de tu vida? - preguntó la Muerte.
- ¿Mañana? ¿No podías avisar antes?, para tener tiempo y hacer todo lo que queda pendiente, dame unos días más, tengo que encontrar la mejor puta.
- Te he dado 21549 días, ¿No has tenido tiempo de sobra?
Cada día puede ser el último, la Muerte aunque te avise, siempre pedirás más días, te aferras a un futuro, a un sueño, a una esperanza, mientras tanto los días pasan y la cuenta puede llegar a cero en cualquier momento.
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