34. Comienza el juego



Allí, en medio de toda esa masa social de chicos y chicas se encontraba el Maestro, el Italiano y Chico Tímido, este comenzó a hablar.

- Bien, es el mejor momento de la noche y quiero demostraros que estoy aprendiendo mucho de Martino y su método, quedamos en 10 minutos, a ver cuantos teléfonos hemos conseguido. ¿Qué os parece?

El Italiano miró al Maestro.

- El chico se lo toma en serio, por mi ... ok, será divertido. - dijo el Italiano y miró a su alrededor creando en ese momento un plan de acción.
- Juguemos, así haremos algo divertido en este antro - respondió el Maestro.

En ese momento Chico Tímido no dijo nada, se perdió entre la gente y así comenzó el "juego", una especie de "caza" de números telefónicos, algo que chico Tímido sabía hacer bastante bien, aunque no tenía ni idea de como pasar a la siguiente "fase" de ese juego que le estaba enseñando Martino.

Pasaron 15 minutos y allí solo estaba el Italiano, hablando con una chica bastante atractiva según el grupo de chicos que los observaba, en ese momento llegó chico Tímido sonriendo como si hubiese ganado una carrera de F1 con un patinete.

- Hola tio, ¿cómo ha ido? - le dijo al Italiano mientras miraba a la peliroja que estaba a su lado.
- Bien, bien, como siempre, ahora mismo lo comentaba con Vicky, eso de ir a coleccionar teléfonos para después concertar alguna cita y tal.
- Es la mejor manera de hacer las cosas, he conseguido 3 números y dos Facebook y ¿tu?
- Ninguno, he estado hablando con ella todo el rato, así que no tengo ningún número nuevo.
- Has perdido el tiempo con ella, no tienes alternativas para la noche, si no sabes pillar números no puedes crear una agenda de citas para la semana.
- Lo que tu digas. - después de responder le dijo algo a Vicky al oído, ella mostró una hermosa sonrisa y se alejó de allí.
- ¿Donde está el Maestro?
- Aquí estoy - dijo casi sin aire - por fin llego.
- ¿Cómo le ha ido? ¿Cuantos números?
- Ninguno, he aprovechado el "juego" para ir al baño y mear, eso si que es satisfactorio.
- Entonces he ganado, soy un auténtico seductor, vosotros dos no, vaya decepción.
- Somos diferentes, eso está claro.

Pasaron dos horas desde ese momento, bailaron, tomaron algunos refrescos, hablaron con más personas y llegó el momento de ir a casa.

- Señores - añadió el Italiano - Allí está Vicky y me voy con ella, nos vemos mañana. - se fue caminando tranquilo hacia la chica, que lo miraba con gracia y con ilusión, como una niña cuando ve los regalos en Navidad.
- Que cabrón, normal que no buscara números, ya tiene una cita con ella - chico Tímido mirando a la nueva pareja de esa noche, con los ojos abiertos y haciendo gestos con las manos que casi golpean al Maestro.
- Es normal, para que quiere teléfonos si puede quedar con la chica en este momento.
- Es otra manera, pero un cierre sólido con teléfono es mejor.
- Es tu manera, no es mejor o peor, es lo que tu haces y según tu enfoque, él ha logrado más éxito que tu.
- Sí, eso sí, tengo mucho que aprender, sólo se conseguir teléfonos, me estanco en hablar con ellas, sigo siendo demasiado tímido, demasiado...
- Llama a alguna chica y queda con una de ellas.
- No puedo, hay que esperar para no parecer desesperado y ser un hombre alfa.
- Te lo diré con tus propias palabras, un hombre "alfa" llama cuando le da la gana.


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