Dios, que está en todas partes, te ve cuando te masturbas, mas no te preocupes, no opina sobre eso, sabe que te gusta, que lo pasas bien, eso de que es pecado... ni caso, es enfermizo cuando se convierte en obsesión o vicio.
Dios está en todas partes.
Dios todo lo ve.
Por lo tanto, cuando estás en soledad, usando tus manos o lo que sea para darte placer, ahí está Dios, en ti, en el placer y en el aire que respiras.
¿Crees que a Dios le importa que te toques?
Se explica la creencia de que es algo malo el placer carnal, entonces ¿porqué Dios nos dió esa forma de recibir placer? Para usarlo, en compañía o en soledad.
Todo, en su justa medida, ni es bueno, ni malo, los extremos son lo que nos pierde, cegarnos por el deseo de usar a otros para recibir placer, de culparnos por darnos placer.
Ahora ya puedes hacer lo que te gusta, con moderación, sin usar (cómo un objeto) y sin hacer daño a nadie.
Que te aproveche!!!
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